Teniendo en cuenta la escasez de programas integrales dirigidos exclusivamente a los adolescentes menores de 18 años, la Dirección Municipal de Juventud puso en marcha, en el año 2005, el primer Programa Municipal que propone un trabajo integrador e interdisciplinario con adolescentes de 13 a 18 años a partir de diferentes actividades recreativas, deportivas y culturales, desarrolladas en instituciones barriales del partido de La Matanza.
Objetivo General:
Mejorar la calidad de vida de los jóvenes facilitándoles el acceso a bienes y servicios sociales.
Objetivos específicos:
- Generar espacios de contención, orientación y acompañamiento de los jóvenes adolescentes.
- Contribuir a la integración socio comunitaria de los jóvenes.
- Mejorar las condiciones de acceso, permanencia y reinserción de los jóvenes al sistema educativo formal e informal.
- Apoyar y fortalecer el desarrollo de capacidades culturales, recreativas y deportivas juveniles
- Desarrollar actividades interdisciplinarias de tipo formativo educativo y cultural destinadas a canalizar las inquietudes de los jóvenes en relación con sus problemas y necesidades.
- Generar espacios de reflexión y debate en temas relacionados a la problemática juvenil.
Mejorar la empleabilidad de los jóvenes adultos
En su primera etapa, el conjunto de actividades propuestas por este programa (talleres de murga, circo, percusión y deportes) se realizó en 9 sedes -entidades de la sociedad civil y centros deportivos municipales- de este distrito mediante convenios de colaboración mutua entre estas entidades y el Gobierno Municipal.
Teniendo en cuenta que el objetivo general del ANDAR es “Fortalecer el proceso socioeducativo y sanitario de los adolescentes entre 13 y 18 años del Municipio de La Matanza”, la Dirección de Juventud redobló las apuestas en el segundo semestre de 2006. Para esta etapa se realizó una investigación de campo que arrojó un nuevo resultado incorporando así nuevas actividades a desarrollarse: deporte, murga, expresión artística, percusión, danza, hip-hop, teatro, dibujo, pintura, artes visuales, gráfica, actividades integrales en escuelas especiales, música, etc.
Actualmente, el programa ANDAR cuenta con alrededor de 31 talleres, los cuales se dictan en 23 sedes de 7 localidades del partido de La Matanza. Concurren en forma regular aproximadamente 670 adolescentes, más allá de que el impacto del Programa ha llegado a cifras muy superiores ( 20.000 aprox.) teniendo en cuenta no sólo a la población fluctuante en los talleres sino también a aquellos jóvenes que estuvieron en los eventos organizados y/o acompañados por el Programa y por la Dirección de Juventud.
Los eventos Intersedes fueron la alternativa de encuentro que sirvió como incentivo para los adolescentes que participaban de dicho programa. En cada uno de ellos se pudo alcanzar un máximo de 700 jóvenes participando. Sin embargo, este año se apostó a una nueva metodología de trabajo orientada a realizar encuentros menos multitudinarios pero más efectivos a la hora de que los jóvenes de las distintas sedes se conozcan entre si, como así también puedan intercambiar experiencias con otros docentes. Así es como se llevó a cabo la jornada de trabajo y trueque cultural realizada en la huerta comunitaria del Bo. Santos Vega.
Es menester destacar que la continuidad del programa ANDAR permitió además generar nuevos espacios de contención para adolescentes en situación de vulnerabilidad social, funcionando como enlace institucional entre adolescentes, organizaciones sociales, las escuelas y las distintas áreas de gobierno local, provincial y/o nacional capacitadas para dar respuesta a sus intereses y demandas, haciendo hincapié en los aspectos socioeducativos y sanitarios.
La Dirección de Juventud busca consolidar y difundir las sedes del ANDAR así como también captar las demandas que la comunidad regional plantee. Por otra parte, el programa propone, más allá de las disciplinas artísticas o deportivas que se enseñan semanalmente en los talleres, establecer ejes de trabajo desde el aspecto social para trabajar periódicamente (ya sea trimestral o cuatrimestralmente) junto a los adolescentes. Metodológicamente estos ejes, que no se establecen arbitrariamente sino de acuerdo a una multiplicidad de factores tenidos en cuenta, se introducen en la dinámica de la clase, o bien se genera un espacio especial dentro de la misma para su abordaje.
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